
ESTE ES EL NÚCLEO de Leonardo Cano / Editorial: Galaxia Gutenberg / Colección: Narrativa / Género: Narrativa. Ciencia Ficción / 184 páginas / ISBN: 9788410107939 / 2024
«Pablo Alcubier va a ser el primer hombre en transferir su mente al metaverso, en un mundo en el que las mujeres ostentan en exclusiva ese privilegio. Mientras llega el día que lo llevará a la inmortalidad, asiste a unas sesiones para fijar los recuerdos, de su mujer y de su hija desaparecida, que se llevará con él. En un futuro muy cercano, el algoritmo de inteligencia artificial creado por una gran corporación ha revolucionado la vida humana. La sociedad está polarizada, las personas viven aisladas y un grupo de hombres se levanta con violencia contra esos privilegios para hacerse con el algoritmo. Pero, incluso ante la promesa de la vida eterna en el metaverso, la búsqueda que ahora emprende Pablo esconde otra intención».
Una de las mejores cosas de pertenecer a un club de lectura es que, la mayoría de las veces, uno se encuentra con libros que no conoce o a los que no había echado el ojo en primera instancia. Sea por la cantidad de lecturas que abundan en el mercado editorial o por la pila de pendientes que me acompaña y que parece crecer más y más cada día, no había reparado en Leonardo Cano y su novela hasta ahora. Gracias, como no, al club de lectura de alt.
Procuro no dejarme llevar por las críticas ajenas ni tampoco por las expectativas, así que empecé a leer Este es el núcleo un poco a ciegas, sin conocer al autor (que por cierto también es de Murcia y de mi quinta) ni tampoco de qué iba la historia. Esta historia, por la cual recibió el Premio Internacional de Novela Ciudad de Barbastro 2024, destaca por lo atípico de su estructura y, tal vez, un poco por adelantarse a algunas conjeturas y reflexiones que sobre las IA aún se encuentran sobre la mesa de debate de infinidad de medios y, por qué no decirlo, gobiernos y empresas tecnológicas. Leonardo Cano, si tenemos en cuenta que esta obra se publicó el año pasado, pero que antes ha pasado por un proceso de escritura, corrección, selección, etcétera, podríamos decir, sin temor a equivocarnos que metió el dedo en la llaga mucho antes de que esa llaga fuera patente para muchos de nosotros y para la sociedad en general.
Se aprecian dos vías importantes en esta novela: una de ellas es la evolución de una sociedad hacía una utopía feminista que, como se ve, también tiene sus defectos; la otra, la evolución de las Inteligencias Artificiales y su uso para hacer de la vida una extensión virtual hacia la mismísima eternidad, lo cual nos expone ante reflexiones un tanto incómodas que nos hacen replantearnos si esa «segunda vida» es necesaria y/o tan importante para la supervivencia o, por el contrario, no solo no merece la pena, sino que plantea cuestiones éticas y morales que, ahora mismo, como digo, están en el aire y en boca de todos.
Centrándonos en la historia, Leonardo Cano toma a Pablo Alcubier, un programador obcecado con la mejora de esta inteligencia, para contarnos con breves pinceladas, retazos de vida diseminados a lo largo del pasado que nos descubrirán hacia el final el punto en común de todos ellos, su obsesión última y y prioridad en todo este juego donde la realidad siempre pesa más que lo intangible y virtual. Así, tomándose como referencia unos a otros, estos momentos nos van llevando de la mano hacia la verdad de Pablo y sus intenciones, pero no solo eso, sino también se nos va deshojando, abriéndose para el lector (no solo para él), dejando que sus sentimientos y sus pensamientos, muchos de ambos reprimidos a lo largo de los años, se muestren en una suerte de redención última antes de transferirse a esa segunda vida, la definitiva, la virtual. Se trata de una historia compleja, con muchas ramificaciones, pero muy enriquecedora. Así que, enmarcada dentro de esa ciencia ficción que cada vez es más ciencia y menos ficción, tenemos ante nosotros una novela que llega en el momento justo.

Víctor Morata (1977) Escritor, autor de «Siervos de la Guadaña» y «La sombra del nagual» (Malas Artes, 2024). Colaborador de la revista digital ZENDA. Finalista del XXIX Domingo Santos de novela y ganador del VII Premio de Relato Yoescribo. Co-director y presentador del podcast FICCIÓPATAS.