13 de julio de 2025

DIARIOS DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL. INÉDITOS (1939-1944) 1. DESDE PARÍS de Manuel Chaves Nogales / Edición: Yolanda Mataró / Editorial: El Paseo / Género: Ensayo. Crónica periodística / 406 páginas / ISBN: 9788419188601 / 2025

Terminé de leer el primer tomo de Diarios de la Segunda Guerra Mundial. Inéditos (1939-1944). 1. Desde París, de Manuel Chaves Nogales. Lo ha editado Yolanda Morató para la editorial El Paseo. Y la sensación que queda es la de haber estado frente a alguien que no solo vivió el inicio del derrumbe europeo, sino que supo contarlo como muy pocos. Con lucidez, con humanidad, con los pies en la tierra y los ojos bien abiertos.

Estas crónicas, escritas desde París, capturan una ciudad que parece resistir como puede, al principio aferrándose a una vida que ya no existe, una vida que se va resquebrajando sin ruido. Hay cafés abiertos, calles que no se detienen del todo, gente que finge normalidad. Pero la guerra está ahí, cada vez más cerca. Y finalmente llega. París cae. Y Chaves lo vive en primera persona, lo ve, lo cuenta. Lo cuenta sin adornos, sin dramatismo gratuito, sin hacerse el héroe. Su estilo es directo, pero no plano. Claro, pero no frío. Tiene esa capacidad rara de ver lo grande en lo pequeño: un gesto en la calle, una conversación casual, una tienda vacía… y de pronto, todo eso se vuelve símbolo de algo más profundo. Del miedo. De la fragilidad. Del momento exacto en que todo empieza a cambiar sin que nadie se atreva a decirlo en voz alta. Pero no solo eso. Hay crueldad, hay muerte, hay fusilamientos, hay crónica. No se limita a narrar lo militar, lo evidente, lo que luego llena los libros de historia. Va más allá. Mira lo cotidiano en lo imprevisible, lo íntimo en lo que se quiere ocultar, lo que casi no se percibe pero lo dice todo. Hay crónicas en las que casi no pasa “nada”, pero uno siente el temblor bajo la superficie. Hay otras que te dejan lisiada el alma por lo que cuenta, y por su similitud con nuestra actualidad. Hay una tensión sorda de una ciudad que se prepara, que se resiste, que se entrega. Yolanda Morató ha hecho un trabajo ejemplar editando este volumen. Ha rescatado más de seiscientos textos que estaban inéditos, los ha contextualizado, ordenado y presentado con un respeto evidente por la voz del autor. El resultado es limpio, fluido, riguroso. Se agradece que se haya tratado este material con tanto cuidado. Se nota que no es solo una edición, sino también una lectura profunda.

Chaves Nogales no escribe para complacer. No busca confirmar certezas ni tranquilizar al lector. Es un testigo incómodo. Ve lo que otros prefieren no ver. Aún sostiene un hilo de esperanza, sí, pero no se engaña. Nombra el horror cuando empieza, señala los errores sin rodeos, describe lo que se transforma a su alrededor: la ciudad, las ideas, la moral. Yo diría que este primer tomo no es solo un documento de época. Es periodismo del bueno. Del que no envejece. Del que observa sin adornar, pero sin perder sensibilidad. Es una escritura al servicio de algo más grande: entender lo que pasa cuando todo empieza a desmoronarse, pero también entender a las personas que lo viven, que lo sienten, que lo sufren.

Al terminarlo, me quedó una mezcla de sentimientos difíciles de separar: admiración, inquietud, tristeza, ganas de seguir leyendo. Porque si este es solo el primer volumen, lo que viene después promete ir todavía más hondo. Más cerca del abismo. La voz de Chaves Nogales sigue hablando desde esas páginas. Y lo hace con una claridad que, hoy más que nunca, resuena como una advertencia. O como una forma de resistencia.

Deja un comentario

Copyright ©2009-2025 LaJUnglaDElasLETras