27 de julio de 2024

NO SE FUSILA EN DOMINGO de Pablo Uriel Díez / Prólogo: Ian Gibson / Ilustraciones: Elena Uriel / Editorial: Fuera de Ruta / Género: Narrativa-Memorias / 605 páginas / ISBN: 9788494789786 / 2021

Es un libro con el que he disfrutado mucho. No sé si ha sido el estilo narrativo del autor, un estilo sencillo, sin pretensiones, o la propia composición de los capítulos, la mayoría de ellos poco extensos, lo que ha hecho que el libro lo haya leído a sorbos, poco a poco.
Pablo Uriel Díez antes que escritor fue, sobre todo, un joven médico soriano que vivió la guerra civil de pleno. En sus memorias cuenta que la sublevación le sorprendió cuando practicaba el piragüismo en el Ebro, remontando el río, cuando estaba por tierras mañas. Le tocó en suertes caer en la zona nacional y pronto fue preso de la represión franquista, debido a sus antecedentes (nimios no obstante) anti fascistas, o pro-republicanos. Tras pasar un angustioso tiempo en prisión, donde cada día que pasaba era uno ganado al fusilamiento, lo acaban liberando, pasando a engrosar las filas del ejército franquista. Sufrió la derrota de Belchite (narración sobrecogedora) y fue capturado por los republicanos, quienes de alguna manera le dieron la oportunidad de redimirse de su pasado nacional.
Estas memorias no son únicamente las de un médico que vivió en sus carnes la tragedia de la guerra civil, también es el retrato de un pueblo dividido por el infortunio y el azar, una estampa pintoresca y lúcida de cada uno de los dos bandos combatientes.
En esta segunda edición de No se fusila en domingo de la editorial Fuera de Ruta, (la primera vez que se publicó el libro se hizo en la editorial PreTextos en 2005) se han incluido textos inéditos, poco más de 100 páginas, que son el relato de casi dos años de cautiverio en tierras valencianas tras caer prisionero en Belchite, en septiembre de 1937. El libro viene prologado por el gran hispanista Ian Gibson y está ilustrado por Elena Uriel, la hija del propio autor, también cuenta con un interesantísimo epílogo y una gran selección de fotografías y documentos que enriquecen aún más la obra.
El estilo narrativo del autor, tal como he descrito al principio de esta reseña, es sencillo y sin pretensiones, pero no está falto de una calidad pulcra, exquisita. Se nota que el autor era una persona bastante culta, muy leída, y es una pena que no condujera parte de su vida laboral hacia unos derroteros más literarios, porque estoy segura de que hubiese terminado siendo un escritor tan reconocido como lo fueron algunos de los escritores españoles contemporáneos a él.
Libro imprescindible en cualquier biblioteca.

1 comentario en «No se fusila en domingo»

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