2 de mayo de 2024

«Cuanto más tiempo pasaba mirándola, más me daba cuenta de que aquello no era bueno. Sus entrañas estaban en lo alto del armario, escondidas tras una caja de galletas. Las galletas eran otra de sus obsesiones. Las comía a todas horas, sin descanso. El color que predominaba en la habitación era el amarillo, amarillo plátano lo llamaba ella. (…) Nadie le pudo contradecir ¡jamás! Tenía la capacidad de reconducir cualquier situación comprometida. Si en un momento determinado, y si era necesario, imprescindiblemente necesario, tenía que matar, se mataba y punto. Aunque ello le costara perderse asistir a las eliminatorias de los Warriors. (…) Cualquier día era propicio para hacerlo. Lunes, martes, miércoles. Lo único que no podía permitirse era equivocarse, eso nunca. Jueves, viernes, sábado. Le hacía falta suspirar por sus propios muertos, para encontrar la paz en lo que iba a hacer. Domingo, día del Señor. (…) ¿Quién puede preferir la Navidad a Halloween? Ninguna persona en su sano juicio preferiría Santa Claus al Hombre Lobo: las dentelladas del gordo son mucho más cómicas. Creo que quiero enamorarme y no puedo. ¿O no será que el viejo Smith la tiene demasiado pequeña para mí?»

Amarillo plátano ( Madison Claytor , 1999)

Bajo el seudónimo de Madison Claytor, se esconde una novelista y poeta estadounidense de la cual solo se sabe (de manera pública) que nació en San Clemente, California, en 1969. Autora considerada maldita, adjetivo por el cual se conoce a esa generación de escritores norteamericanos de finales del siglo pasado que se escondían, para crear sus obras, tras su anonimato y exilio voluntario. Tiene publicadas tres novelas (Amarillo plátano, Sus majestades las pulgas y Orinoco vacío), de las cuales solo está traducida al castellano Amarillo plátano; y cinco poemarios (Poemario 1, Poemario 2, Poemario 3, Poemario 4 y Poemario 5). Todas sus obras están descatalogadas a día de hoy, y son muy preciadas y difíciles de encontrar.

Deja un comentario