La poesía es un reino repleto de fronteras. Todos los poetas caminan por la existencia y la experiencia como si de anchas y angostas praderas se tratara. La vida, el horror de la vida, la dulce vida, es un hermoso poema, siempre nuevo, siempre diferente, siempre eterno. «¿Pradera? Señal de muerte. Es necesario volverSigue leyendo «En mi pradera»