
CAMPESINOS Y SEÑORES de Theodor Kallifatides / Traductoras: Carmen Montes Cano y Eva Gamundi Alcaide / Editorial: Galaxia Gutenmberg / Género: Narrativa.Metaliteratura / 224 páginas / ISBN: 9788419738646 / 2024
«Las obras que encumbraron a Theodor Kallifatides como uno de los grandes escritores europeos de la segunda mitad del siglo xx fueron sus tres novelas Campesinos y señores (1973), El arado y la espada (1975) y Una paz cruel (1977), que ahora se traducen por primera vez al español. Con ellas, Kallifatides retrató su infancia y su adolescencia y a la vez el período más trágico de la historia contemporánea de Grecia, el que va desde que los nazis invaden el país en 1941 hasta el fin de la guerra civil griega en 1949, y la miseria de la posguerra en un país devastado. En Campesinos y señores, todo empieza en un pequeño pueblo al sur del Peloponeso, Yalós. Primero llegan las tropas de Mussolini, reemplazadas pronto por el ejercito nazi, mucho más brutal y cruel. Pero las invasiones apenas aparecen como una tormenta lejana. La mirada del novelista, tierna, compasiva y llena de humor, se centra en los habitantes de Yalós, que intentan sobrevivir, entre el miedo, el hambre, la aceptación y la resistencia: el cura heterodoxo, el alcalde colaboracionista, el panadero, los campesinos, el maestro socialista, el tonto del pueblo y sobre todo las madres y las abuelas, verdaderas protagonistas de los libros de Kallifatides».
En una presentación a la que acudí hace poco para escuchar al autor hablar de su última novela, Una mujer a quien amar (Galaxia Gutenmberg, 2025), Kallifatides decía que él escribía para dejar un legado al mundo, en cierto modo, para estimular la memoria y que no se pierda la historia de cara a las generaciones futuras, para que no se repitan nuestros errores. También decía que él no concebía otro modo de contar las cosas y que tampoco podía pensar en sí mismo lejos de la escritura, que es, en verdad, lo que daba sentido a toda su vida desde que, con cinco años, escribió sus primeras palabras y se las mostró a su padre. Por aquel entonces, su padre estaba encarcelado y los alemanes campaban a sus anchas por su pueblo natal, que, en el libro que nos ocupa y (creo) en el resto de su obra en que se refiere a él, lo llama Yalós.
Campesinos y señores es el primer libro de una trilogía ambientada en esos años de ocupación nazi y posterior guerra civil, de revueltas y rebeliones, de ajusticiamientos públicos y hambruna, de carestía económica y moral, de traición y miedo. En definitiva, de sufrimiento y dolor. Eso es algo que, con una pizca de humor –tal vez aludiendo a la época que se relata, pues el narrador se supone que es Kallifatides y la época alude a la de sus cinco años– y una sutil inocencia, infantil o no, se encarga de esbozar a través de los múltiples personajes del pueblo, destacando sus actos y sus pensamientos como si, a veces, él mismo pudiera estar dentro de sus cabezas y sus corazones, pensar y sentir como ellos, vivir sus vidas desde la distancia que supone la narración y la cercanía a la que invita el recuerdo en primera persona.
Es una carga dura que comienza con levedad, como la brisa que precede a la tormenta. Se anuncia la llegada de los alemanes, los alemanes llegan, se establecen, hay cambios, señalamientos y castigo. Todo esto en un crescendo que se nos viene encima sin apenas darnos cuenta y contado maravillosamente por su autor en una crónica de ese periodo de guerra que estremece por la sencillez e inevitabilidad de esa devastación nazi. El autor se posiciona con objetividad detrás de ese objetivo y nos ofrece una visión pormenorizada de cada persona: el sacerdote, el abogado, el maestro, el alcalde… Todos ellos con sus inclinaciones y su particular visión de la política y el poder. Todos ellos con una disposición frente a lo que se les viene encima y que, en ocasiones, los convertirá en mezquinos y traidores, en rebeldes y fugitivos, en secuaces y cómplices. El papel de cada miembro de la comunidad se verá afectado por esta intrusión y, con ese cambio, también su posición social que, como dice el autor, repercutirá en las diversas fortunas de quienes supieron aprovecharse de las desgracias ajenas y espolearon su dolor con mentiras e inquina.
Es una obra dura que llega casi hasta el final de ese asentamiento alemán en tierras griegas. Los yalitas se desquebrajan como sociedad mientras hay facciones dentro que se unen en grupos de mentalidad afín. Todo ese proceso de desmembramiento y redistribución se ve claramente a pesar de la sencillez dentro de este tremendo texto de Theodor Kallifatides. Sin ambages ni tapujos. Sin censura. Kallifatides llama a todo por su nombre. Y, por desgracia y a pesar del dolor, no deja de ser una lectura necesaria para, como él mismo decía, no olvidar.

Víctor Morata (1977) Escritor, autor de «Siervos de la Guadaña» y «La sombra del nagual» (Malas Artes, 2024). Colaborador de la revista digital ZENDA. Finalista del XXIX Domingo Santos de novela y ganador del VII Premio de Relato Yoescribo. Co-director y presentador del podcast FICCIÓPATAS.
