
LA CASA DE HUÉSPEDES de Ana Lena Rivera / Editorial: Grijalbo / Género: Narrativa. Histórica / 540 páginas / ISBN: 9788425365133 / 2025
Hay libros que llegan a nuestras manos en el momento oportuno, como si supieran que necesitamos sus páginas para recordar, para comprender o para reconciliarnos con algo de nosotros mismos. La casa de huéspedes, la más reciente novela de Ana Lena Rivera, ha sido para mí uno de esos hallazgos. Es la segunda obra que leo de la autora y confieso que me ha cautivado desde las primeras páginas: su forma de contar, de hacer que lo íntimo y lo histórico convivan en un mismo párrafo, me ha parecido tan honesta que he sentido la necesidad de leer con calma, casi con gratitud.
La historia arranca en Madrid, 1937, cuando una bomba arrasa un edificio cercano a la Gran Vía y, con él, las vidas de dos jóvenes: Elvira, que se encontraba en Francia y ve desaparecer el hogar que anhela, y Ángela, que sobrevive al estallido y toma una decisión que la marcará para siempre: huir con un bebé huérfano en brazos y asumir una identidad falsa. A partir de ese instante, sus caminos —aparentemente distantes— quedarán unidos por un hilo invisible que se tensará a lo largo de generaciones.
Debo confesar que la lectura me ha tocado especialmente por una razón personal: mi tía abuela, madrileña de nacimiento, vivió la Guerra Civil y perdió su casa durante los bombardeos. En los veranos de mi juventud, en la casa de veraneo del pueblo, ella nos relataba a mis primos y a mí aquel suceso con la serenidad de quien ha aprendido a convivir con la memoria del dolor. Mientras leía algunos pasajes de La casa de huéspedes, sentí que esas voces familiares, esas imágenes que creí olvidadas, regresaban con fuerza. Ana Lena Rivera consigue algo que pocos autores logran: que la ficción ilumine la memoria personal, que los personajes inventados despierten recuerdos verdaderos. Más allá de lo emocional, hay que decir que La casa de huéspedes es una novela que se disfruta intensamente. Pese a sus más de quinientas páginas, se lee con una ligereza sorprendente. Me ha sucedido algo que no me pasaba desde que descubrí El tiempo entre costuras de María Dueñas: llegaba al final de cada capítulo con la tentación de seguir, sin reparar en la hora, sin ganas de detenerme.
El estilo de Ana Lena Rivera es realista y profundamente narrativo, con vocación de crónica íntima entrelazada con memoria histórica. Escribe con un tono confesional, en primera persona, alternando la inmediatez de la emoción con la solidez de la reconstrucción documental. El resultado es un equilibrio difícil: lo íntimo y lo colectivo conviven sin anularse. Sus diálogos, sobrios y verosímiles, refuerzan la cercanía de los personajes, que no son héroes, sino seres humanos con sus contradicciones, sus pequeños gestos y también sus silencios elocuentes. Creo que además la autora demuestra un compromiso con la memoria femenina. Las protagonistas (madres, hijas, amigas) no aparecen como simples víctimas de la guerra o de las circunstancias, lo hacen como personas capaces de transformar el dolor en fuerza. En este aspecto, la autora se inscribe en una corriente literaria que revisita la Guerra Civil y la posguerra desde las voces silenciadas, nunca perdiendo de vista la dimensión universal de la pérdida y la resiliencia.
Ana Lena Rivera, nacida en Oviedo en 1972 y afincada en Madrid, dejó atrás su carrera en el mundo empresarial para dedicarse de lleno a la escritura. Tras una primera etapa en el género noir con la trilogía protagonizada por Gracia San Sebastián, ha sabido reinventarse en un registro más íntimo y testimonial con títulos como Las herederas de la Singer o La niña del sombrero azul. La casa de huéspedes es la confirmación de una madurez literaria incuestionable.

Adoración Negre Pujol (Madrid – 1981) Exploradora de mundos literarios desde la infancia. Amante de la lectura apasionada que encuentra la magia entre páginas, compartiendo historias con quienes comparten su devoción.