
«Constituía un placer especial ver las cosas consumidas, ver los objetos ennegrecidos y cambiados. Con la punta de bronce del soplete en sus puños, con aquella gigantesca serpiente escupiendo su petróleo venenoso sobre el mundo, la sangre le latía en la cabeza y sus manos eran las de un fantástico director tocando todas las sinfonías del fuego y de las llamas para destruir los guiñapos y ruinas de la Historia. Con su casco simbólico en que aparecía grabado el número 451 bien plantado sobre su impasible cabeza y sus ojos convertidos en una llama anaranjada ante el pensamiento de lo que iba a ocurrir, encendió el deflagrador y la casa quedó rodeada por un fuego devorador que inflamó el cielo del atardecer con colores rojos, amarillos y negros. El hombre avanzó entre un enjambre de luciérnagas. Quería, por encima de todo, como en el antiguo juego, empujar a un malvavisco hacia la hoguera, en tanto que los libros, semejantes a palomas aleteantes, morían en el porche y el jardín de la casa; en tanto que los libros se elevaban convertidos en torbellinos incandescentes y eran aventados por un aire que el incendio ennegrecía».
Fahrenheit 451 (Ray Bradbury, 1953)

Ray Douglas Bradbury nació en Waukegan, Illinois el 22 de agosto de 1920. Como escritor orientó su obra a la ficción, sobre todo la fantasía, el terror y la ciencia ficción. Sin embargo, también flirteó con otros géneros como el realismo, el costumbrismo o el negro-policial. Bradbury no pudo asistir a la universidad a causa de ciertos problemas económicos, pero eso no le frenó en su afán de conocimiento; pasaba la mayor parte del tiempo en la biblioteca leyendo libros y formándose de forma autodidacta en las horas en las que no vendía periódicos, trabajo que hubo de desempeñar para ganarse la vida desde 1938, año en que se graduó en Los Ángeles High School, hasta 1942. Sus primeros cuentos los escribió en esa época. Aquellos primeros trabajos, que consiguió vender a algunas revistas, fueron compilados en 1947 en un volumen que lleva por título Dark Carnival. Fue su primer libro publicado. Años más tarde trabajó como guionista y argumentista de numerosas películas y series de televisión. Su obra se ha adaptado al cine menos de lo que sus fans hubieran deseado, siendo la última adaptación la que hizo Peter Hyams en 2005 con El sonido del trueno. También, entre 1985 y 1992, se llevó a televisión la serie The Ray Bradbury Theater, una producción canadiense cuyos capítulos se basaban en las novelas e historias cortas del autor. François Truffaut fue el primer director en trasladar una de las novelas de Bradbury al cine y lo hizo con una de sus más famosas obras en 1966: Fahrenheit 451. Obtuvo más de una veintena de premios literarios, entre los cuales cabe destacar el Premio Mundial de Fantasía: por una vida de logros (1977), el Premio Jules Verne (1984), el Premio Bram Stoker (1989) en tres categorías (Mejor obra de ficción, Mejor historia corta y Reconocimiento por toda una vida de trabajo), el Premio Bram Stoker a la mejor antología por One More for the Road (2003), el Premio Retro Hugo a la mejor novela de 1953 por Fahrenheit 451 (2004) y una «Mención especial» al Premio Pulitzer por su «distinguida, prolífica y profundamente influyente carrera como un incomparable autor de ciencia ficción y fantasía», entre otros galardones y nominaciones. Algunos datos curiosos: posee una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood y existe un asteroide que lleva su nombre, el (9766) Bradbury. Pasó la mayor parte de su vida en Los Ángeles, California, donde murió el 5 de junio de 2012 a los 91 años. Se le conoce por obras tales como: Crónicas marcianas (1950), El hombre ilustrado (1951), Fahrenheit 451 (1953), El país de octubre (1955), La feria de las tinieblas (1962), El árbol de las brujas (1972), Cementerio para lunáticos (1990) o Zen en el arte de escribir (2002).
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