Se ha escrito mucho sobre viajes interdimensionales a lo largo de las últimas décadas y, a medida que la Teoría Cuántica ha ido ganando adeptos y relevancia, también acerca de este tema. No es raro incluso que haya series como Fringe que han abusado de ese recurso durante temporadas enteras y, sin embargo, aquí está Materia oscura de Blake Crouch para darle una nueva vuelta de tuerca al tema y, por qué no, al género de la CiFi especulativa a la par que emplea los recursos de la distopía más costumbrista pero elevado a la enésima potencia. El autor ha tomado un elemento que ya de por sí despierta el interés del lector desde el primer momento y, lo que en principio se presenta predecible hasta una buena parte de la novela, luego se expande y se transforma en otra cosa, en algo menos tangible y que pone al lector en un brete. El modo en que el último tercio de la novela avanza, o quizá más bien la segunda mitad, resulta agobiante y trepidante, porque al margen de que se trate de literatura de género, de esa que muchos aún hoy menosprecian, también es un thriller que no deja que la atención se disperse ni se desvíe, sino que la atrae y la retuerce hacia una reflexión profunda sobre lo que nuestras vidas son y podrían haber sido. Plasmar las ideas que plantea Crouch en una novela, sin que suene tedioso, pedante o forzado es complicado. No sé si sus apreciaciones sobre el tema son acertadas, pero de lo que sí puedo dar fe es que el autor las plantea de forma sencilla y comprensible para un lego en la materia. Es más, conforma una historia coherente y creíble (hasta cierto punto, claro) que, además, nos involucra con preguntas que el propio protagonista se realiza a sí mismo pero que, está claro, van dirigidas a aquel que está al otro lado de la pantalla de papel. El estilo de Crouch en Materia oscura es directo y rápido, con párrafos de una sola frase que bombardean al lector durante muchas páginas y agilizan la lectura. En algunas partes ese bombardeo se detiene en párrafos más largos y, como decía, incitantes a la reflexión de ciertas cuestiones filosóficas relativas a la Teoría Cuántica y sus consecuencias una vez llevada a la práctica. A veces intercala algún que otro capítulo como ventana hacia otro lugar en el que el protagonista no tiene participación, no obstante, la mayor parte del tiempo, es nuestro Jason Dessen quien nos ofrece su relato en primera persona. La experiencia con esta novela ha sido curiosa: al principio me llamó la atención; después de leer unas páginas, esa atención decayó; al seguir leyendo, la atención fue in crescendo; y a partir del último tercio, ya no pude parar de leer hasta el punto y final, por lo que considero que ha sabido cerrar en un punto álgido de la historia, aunque, eso sí, se trata de un final que huele a probable secuela. Sea como fuere, Materia oscura me ha gustado más de lo esperado y he disfrutado mucho con su lectura.
Víctor Morata Cortado
MATERIA OSCURA de Blake Crouch / Título original: DARK MATTER / Traducción: Noemí Risco Mateo / Editorial: Nocturna Ediciones / Colección: Noches negras (nº3) / Género: Novela / 419 páginas / ISBN: 9788416858217 / 2017