Un mundo infiel

Me sabe mal. Cuando una lectura no solo no me llega, sino que me deja indiferente o peor aún, traspuesto, me sabe mal. Cada cual sabe el trabajo que anda detrás de sus obras y calificarlo no siempre es tarea fácil. Un mundo infiel posee detalles muy destacables y no podría estar más de acuerdo con la sinopsis y los comentarios de presentación que de la novela hay publicados en la web de la editorial acerca de sus particularidades. Un mundo infiel goza de un lenguaje que, efectivamente, parece haber captado la autenticidad del entorno en el que se desarrolla, pero es precisamente ese lenguaje el que me ha impedido disfrutar más de la historia. No estoy muy familiarizado con la jerga mexicana, casi nada, así que, cuando Julián Herbert la transcribe en estas páginas, me pierdo a la vez que me incomodo. Puede que ese fuera el sentido y la motivación original del autor, no lo sé, pero para mí resultó un obstáculo. Y ya con ese handicap de base, me costó muchísimo meterme en la historia y empatizar con los personajes. No la disfruté. No tanto como me hubiera gustado. Sin embargo, entiendo los motivos por los que esta novela pudo encumbrar a su autor y también por los que se le admira. Conseguir este grado de mimetización con el medio es particularmente difícil. Del mismo modo que resulta complicado trasladar esa jerga con la naturalidad con la que Herbert lo hace al papel y adaptarla a su historia con esa misma naturalidad. A ese respecto no hay nada que pueda objetar. Y, sin embargo, tanta fuerza doy a la impresión final y al disfrute de la lectura, que para mí, ahora mismo, esos detalles quedan relegados a un segundo plano. Habrá quien pueda gozar de esta novela a otro nivel, para quien esos obstáculos que para mi han supuesto un freno, sean todo lo contrario. No lo sé, pero en aras de la sinceridad, no puedo calificar esta lectura con una mayor puntuación. A pesar de que a un comienzo difícil le siguió una calma chicha y luego un desenlace menos complicado. A pesar de que hay elementos que me gustaron. A pesar de todo ello, la suma no acabó por complacerme. No como esperaba.